El encuentro fue propiciado por la Secretaría de Participación y Desarrollo Social, como una forma de rescatar el respeto y el valor que se les debe a las personas mayores

Cartagena de Indias D. T. y C; 5 de octubre del 2023. La Unidad de Infancia, Juventud y Familia de la Secretaría de Participación y Desarrollo Social del Distrito estuvo al frente de un encuentro intergeneracional en el barrio Lo Amador.

Dicha reunión se cumplió en el hogar infantil del barrio en mención, y contó con la presencia del Grupo Organizado y con jóvenes y niños, quienes compartieron experiencias de tiempos pasados.

Para tales efectos, las funcionarias de la Unidad de Infancia, Juventud y Familia se aprovisionaron de una máquina de escribir, un teléfono fijo, varios discos de acetato, un sobre para cartas, una lámpara a gas kerosene, un teléfono celular primigenio y una plancha a carbón.

Tomando como punto de partida estos elementos, los asistentes contaron anécdotas con las cuales ilustraron a jóvenes y niños sobre cómo eran las dinámicas hogareñas y sociales hace más de cincuenta años.

Los asistentes señalaron que el barrio Lo Amador es uno de los más antiguos de los extramuros de Cartagena y, en su momento, constituía una especie de renovación urbana de la ciudad, donde la relaciones familiares y comunitarias estaban supeditadas al envío de cartas y al uso de los teléfonos públicos, mientras que las máquinas de escribir pertenecían al ámbito de las oficinas públicas y privadas, o eran adquiridas por algunas familias privilegiadas.

“Mientras las cartas se demoraban hasta una semana para llegar a su destino, los telegramas y los marconis llegaban en cuestión de horas. Estos últimos eran el símbolo de lo urgente”, compartieron adultos mayores y funcionarias.

Wilson Padilla Cabarcas, un habitante de Lo Amador, quien lleva 63 años viviendo en esa zona, expresó su agradecimiento a la Alcaldía de Cartagena por organizar este tipo de encuentros, pero acotó que actualmente “existe en el barrio un distanciamiento entre jóvenes y ancianos, porque ellos no tienen el sentimiento que nos enseñaron nuestros padres, en el sentido de saber convivir y tratar bien al adulto mayor”.

Regina Mangones, quien se dice nacida y criada en Lo Amador, consideró que “estos encuentros son muy buenos para enseñarles a los niños cómo era el modo de vida en nuestros tiempos. Pero, ante todo el respeto, que últimamente se ha olvidado mucho”.

Katiuska Patrón Álvarez, una de las funcionarias de la Secretaría de Participación y Desarrollo Social del Distrito, explicó que “estas actividades con adultos, niños y jóvenes se realizan para rescatar tradiciones y cultura, pero principalmente para que los niños aprendan el valor que tiene el adulto mayor, aspecto que se ha ido perdiendo con el pasar de los años”.
Calificó como “excelente la participación de adultos y jóvenes en este encuentro, porque para ellos compartir anécdotas del pasado es maravilloso. Lo que más se rescata de estos encuentros es el respeto por el adulto mayor”.

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